Mientras el estupor sigue presente en las calles de Tolosa, donde un joven de 17 años que intentaba robar un supermercado fue asesinado a balazos por el dueño del comercio, se conocieron las imágenes de un comercio cercano que captó toda la secuencia.
En las imágenes, que duran menos de dos minutos, se llega a ver cuando los dos ladrones arriban en moto al supermercado «Don Otto», ubicado en 520 entre 11 y 12, e ingresan al comercio.
Un minuto y medio después el registro capta como uno de los jóvenes sale corriendo aunque con una aparente renguera mientras que su cómplice llega hasta la vereda y se desploma. Se trata de un joven de 17 años que según fuentes policiales es conocido en la zona de El Mercadito.
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Atrás del herido de muerte aparecen tres personas, entre ellos un hombre de remera negra que sería el comerciante que ejecutó los disparos. También se ve a presuntas empleadas o clientes del local.
Las imágenes fueron captadas por cámaras que estaban ubicadas en una pollería de la vereda de enfrente y muestran cómo el ritmo del tránsito de la avenida 520 y del barrio en general parece normal.
ASÍ FUE EL ROBO EN TOLOSA
De acuerdo a lo que se pudo reconstruir en el lugar y a partir del aporte de los testigos, todo comenzó cuando al menos dos delincuentes armados que ingresaron al local y amenazaron a los trabajadores exigiéndoles el dinero de la recaudación y otras pertenencias.
Según se pudo reconstruir hasta ahora, una de esas víctimas logró correr hasta la planta alta del local para avisarle al propietario del comercio todo lo que estaba sucediendo. El hombre, ofuscado, descendió a la planta baja a toda velocidad y allí se topó con los asaltantes, desatando una balacera que acabó con los ladrones en fuga.
Los investigadores explicaron que, tras los disparos, uno de los acusados logró huir de la escena, pero su cómplice cayó baleado en la vereda del lugar. Las heridas terminaron siendo fatales.
En horas de la tarde, el fiscal Álvaro Garganta decidió que el comerciante involucrado en el hecho -cuya identidad se preserva- quede en libertad por no representar eso un riesgo procesal, en tanto se espera que preste declaración.
La continuidad del expediente judicial, por ahora caratulado como «homicidio en ocasión de robo», seguirá con el testimonio de quienes estaban presentes en ese momento, el análisis de la autopsia y la determinación si la muerte se produjo bajo condiciones de legítima defensa o no.