Este joven se salvó de milagro. Motochorros le gatillaron para robarle la mochila y el celular pero la bala no salió.
La escena se dio en 889 y 843, en San Francisco Solano cuando un joven se baja de su auto para entrar a la casa y ven venir a dos motochorros. El muchacho no se resiste, ya antes de que uno de los delincuentes baje de la moto, él levanta los brazos y le entrega el celular y la mochila. Pese a la buena disposición del robado, el ladrón igualmente le gatilla a la cabeza pero afortunadamente la bala no salió.
Al ver la situación un vecino alertó a los demás y los ladrones huyeron solo con el teléfono.