Francisco Martínez Mojica, profesor del Departamento de Fisiología, Genética y Microbiología de la Universidad de Alicante (España), recibió este jueves el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ).
El español en diálogo con PERSPECTIVA SUR se confesó emocionado por recibir la distinción de una universidad pública, porque “yo provengo de una universidad pública también, toda mi carrera ha sido en la educación pública, y trabajo en una universidad pública. El honoris causa es el galardón más alto que puede otorgar una universidad así que más no se puede pedir. Si lo recibes en tu país, te pones contentísimo, pero si encima es un reconocimiento de un país hermano, mucho más”.
La técnica de CRISPR consiste en “unas proteínas que tienen las bacterias, que actúan como tijera genética, la cual permite transferir genes a una célula o ser vivo, sea una planta, sea un animal, o un ser humano. Estas tijeras logras dirigirlas a dónde quieres, con mayor precisión que otras tijeras de antaño. Con ellas se puede cortar una porción del ADN donde haya una alteración o mutación genética, que hace que el individuo tenga una enfermedad, como albinismo, o distrofia muscular, o retinosis pigmentaria, o una infección por el virus del Sida, y entonces se puede rectificar ese error. Esto es lo que se llama, una ‘edición genética’, porque cortas lo que no sirve y luego pegas lo que sí”.
Esta técnica de CRISPR “se está utilizando mucho en los laboratorios para averiguar cuáles son las causas de muchas enfermedades congénitas, cuáles son los errores que hacen que un individuo tenga un cáncer determinado. Esto ya se está haciendo en células, en laboratorios in vitro, y también mucho en animales, en los que se reproduce una enfermedad para estudiarla y poner a prueba fármacos”, dijo Martínez Mojica.
“También se está trabajando con células de humanos, y se han generado embriones de humanos, al punto de que hace unos meses nacieron unas niñas gemelas modificadas genéticamente a nivel del embrión. Porque se pueden modificar células de la línea germinal, y también se están generando estas herramientas en más de 20 ensayos clínicos para curar el cáncer, y enfermedades de la sangre”.
ETICA
Consultado sobre los debates éticos sobre tema genético, los consideró muy pertinentes por cuanto “desde hace diez años hay herramientas que permiten la modificación genética dentro de las células, y son muy fáciles de utilizar, lo que significa que los puede hacer casi cualquiera. Entonces si bien la mayoría de los científicos somos gente muy sensata, pero como en todas partes hay algunos que no tienen la suficiente responsabilidad y podrían hacer cualquier cosa con una herramienta muy potente. Por eso es necesario que la legislación sea muy clara estableciendo qué está bien, y que castigue al que cruce esa línea; porque de lo contrario, esa línea se va a cruzar”, advirtió el científico español.
Por su parte, el rector Alejandro Villar destacó que “este es un hecho muy importante que Martínez Mojica haya aceptado nuestro galardón. Es uno de los científicos más relevantes de los últimos tiempos; la técnica que ha desarrollado permitirá ampliar los horizontes de la biotecnología y estamos muy contentos que se haya tomado en su apretada agenda unos días para recibir el título que le damos nosotros”.
“Para la ciencia, para la tecnología, la educación pública es fundamental, y Martínez Mojica es una clara muestra de ello, por cuanto hoy sigue trabajando en la universidad pública”, agregó.
Aclaró finalmente que esta técnica se estudia y aplica en la carrera de Biotecnología que se cursa en la Universidad de Quilmes.