Las investigaciones se iniciaron a fines de mayo y principios de junio del corriente año, en las ciudades fueguinas de Río Grande y Ushuaia, a raíz de la denuncia de varios adultos mayores que manifestaron haber sido engañados y robados con el ardid del cambio de sus ahorros en dólares de billetes viejos por los de nuevo diseño. Esta modalidad consistía en que los miembros de dicha organización criminal se hacían pasar por familiares de las víctimas o por supuestos empleados bancarios. Estos le comunicaban que esos billetes dejarían de tener valor en el mercado de divisas por ser viejos y que por lo tanto debían cambiar sus viejos billetes por otros nuevos. “Los dólares que no sean nuevos van a dejar de tener valor. Hay que cambiarlos urgente por los azules”, les decían. Varias víctimas entregaron el dinero a estos individuos en la puerta de su domicilio en un paquete y no volvieron a verlo. Dicha maniobra está estimada en miles de dólares.
Posteriormente, el Juzgado de Instrucción Nº 1 del Distrito Sur de la ciudad de Ushuaia, provincia de Tierra del Fuego a cargo de Javier Ignacio De Gama Soler, Secretaría Penal a cargo de Sergio Pepe ordenó la investigación. Por ello, los efectivos federales llevaron a cabo amplias y precisas tareas de campo durante varios días para establecer la identidad y paradero de los involucrados. De esta manera se logró establecer el rol que ocupaba cada uno de los miembros de esta banda, en particular dos, con sendos antecedentes por distintos delitos.
Con el desarrollo de las investigaciones, los uniformados determinaron que los implicados se alojaban en hoteles de primera línea y aguardaban el llamado de sus cabecillas para retirar dicho paquete. Luego el dinero era trasladado a la Ciudad de Buenos Aires y si el límite era superior al autorizado para viajar (diez mil dólares), era depositado en cuentas pertenecientes a un abogado – contador con domicilio laboral de la zona norte de la Provincia de Buenos Aires, el que posteriormente cobraba los valores simulando ser producto de su actividad.
Con el total de las pruebas adquiridas, el magistrado ordenó cinco allanamientos en los barrios porteños de Mataderos, Flores y en las localidades bonaerenses de Valentín Alsina, Victoria y Ciudad Evita.
Durante el operativo fueron detenidos dos hombres de 35 años, entre ellos el contador-abogado. Asimismo se secuestraron varios teléfonos celulares, computadoras de escritorio, relojes, joyas, un vehículo, una camioneta, tarjetas bancarias, informes bancarios, notebooks, 1.752.270 pesos, más de ocho mil dólares, una máquina de contar billetes, pasajes aéreos, una pistola calibre .380 con su carga completa, un cargador para veinte municiones, 60 municiones calibre .22 y demás elementos de interés para la causa.
Los aprehendidos, junto con los elementos secuestrados, quedaron a disposición del magistrado interventor.